TRAS LAS HUELLAS DE ÁFRICA

Hace algo más de dos años me embarqué en la aventura de elaborar libros colectivos con niñas y niños. Todo empezó en el 2008. Estaba trabajando en el CRA PIMAFAD de Almoguera (Guadalajara) y nos llegó la información del Maratón de cuentos de Guadalajara. Una de las actividades que se realizan es una convocatoria para presentar libros gigantes desde los centros educativos.

El reto era difícil, ya que teníamos que pensar en un formato de libro común, con una técnica sencilla de ilustración y un texto que, cuando juntáramos todas las páginas, fuera coherente. Esto es aparentemente sencillo, pero se complica cuando se trata de un colegio rural, con aulas en distintos pueblos. Los maestros nos veíamos con poca frecuencia y, eso forzó realizar una programación de la actividad muy detallada, que resultó ser una ventaja para mi ¡aprendí muchísimo!

Por aquel entonces, vivíamos juntos algunos maestros, en lo que llamamos "la comunidad". El curso se hace largo cuando estás lejos de tu gente, perdida en un pequeño pueblo de Guadalajara. De modo que, diseñar las ideas básicas del proyecto fue nuestro entretenimiento durante unos días. Entre Agustina, Angelines, Begoña, Ana y yo empezamos a dar forma a la idea. Pensamos que lo mejor sería hacer un libro de adivinanzas. Así, en cada pueblo, podían escribir un texto y hacer una ilustración.

En muchos pueblos las aulas eran de niños entre 3 y 8 años, por lo que se decidió que el libro se realizaría por el alumnado de infantil y primer ciclo de primaria.

El tema del Maratón aquel año era África. Como a los niños les encantan los animales, una buena idea sería investigar un poco sobre los animales que podíamos encontrar en el gran continente y elegir uno por clase. Elegimos la técnica de ilustración de Eric Carle, porque es muy sencilla para hacer con ellos y el resultado es muy vistoso.

Pensando cómo decorar la página del texto, se nos ocurrió poner las huellas del animal a modo de pista, y así fue como llegamos al título: Tras las huellas de África.

Las chicas y chicos de primero y segundo del centro de cabecera se encargaron de hacer la portada, contraportada y portadilla. En las aulas de tres y cuatro años hicimos las guardas. El resultado fue el fantástico libro que puedes ver pinchando aquí. Para abrir boca: la portada...


Lo mejor es que a los pequeños les encantó la experiencia y, por supuesto, poder jugar a adivinar con el libro que ellos mismos habían creado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Tu opinión cuenta... ¡cuenta tu opinión!